Por lo anterior, tenemos que muchos de los niños zamarreados o sacudidos, normalmente tienen a padres violentos, por lo cual es muy probable que sean niños y jóvenes violentos, con un comportamiento agresivo y que la violencia la vivan como una manera natural de supervivencia y así como consecuencia tenemos también a niños que conforme crecen son maltratados, como lo refiere la misma OMS en su Informe mundial sobre la violencia y la salud. Washington, DC: OPS, en donde refiere lo siguiente:
El niño golpeado, uno de los síndromes del maltrato de menores, es el del “niño golpeado”. Este término se aplica en general a los niños que presentan lesiones repetidas y graves en la piel, el aparato esquelético o el sistema nervioso. Incluye a niños con fracturas múltiples producidas en distintas etapas de su vida, traumatismo craneoencefálico y traumatismo visceral grave, con indicios de un castigo repetido. Afortunadamente, si bien los casos son trágicos, esta modalidad de maltrato es poco conocida. Según la Organización Mundial de la Salud, en 2000, hubo unas 57 000 defunciones atribuidas a homicidios en los menores de 15 años de edad. Las estimaciones de los homicidios de niños a nivel mundial indican que los lactantes y los niños muy pequeños corren un riesgo mayor, con tasas en el grupo de 0 a 4 años de edad que equivalen a más del doble de las observadas en los niños de 5 a 14 años.[1]
[1] OMS (2002). Informe mundial sobre la violencia y la salud. Washington, DC: OPS