Universidad de Ciencias Jurídicas
Hablar de liderazgo en tiempos de COVID, es hablar de un poder insustituible que solo tienen las mujeres y no es por menospreciar a los hombres, es que parece ser más sencilla la vida de ellos, porque culturalmente se les ha colocado en puestos de control o dirección, en cambio a las mujeres ese poder que nos ha sido quitado durante milenios, parece hoy reivindicarse con la igualdad de género, sin embargo; detrás de la puerta de los hogares las cosas cambian, y es que deben lidiar con múltiples factores durante el confinamiento para poder atender al mismo tiempo una serie de actividades, resaltando lo principal su familia, su vida laboral, sus quehaceres.
Además de ello, durante esta pandemia, muchas mujeres se encuentran en posiciones de liderazgo político, la respuesta que han tenido a pesar de la presión que exige el momento que vive el mundo ha demostrado su capacidad para dirigir, decidir, comunicar y resolver muchos de los aspectos relacionados con esta crisis sanitaria, este poder que se encuentra conferido entre sus manos, se ha confrontado con la actividad personal que cada una de ellas tienen, con su vida familiar, con la atención incluso a sus padres o hijos, se han vuelto multifacéticas.
El liderazgo femenino también se ha visto reflejado en nuestras médicos de primera línea, en aquellas que día a día sortean la muerte frente a la toma de decisiones con un centenar de pacientes con el virus, acompañadas de enfermeras que junto a ellas tiene jornadas extenuantes, muchas de ellas, hace años no hubieran podido siquiera imaginar que estarían de la mano con la muerte, es más algunas no han tenido tanta suerte y han sucumbido al virus, cada una de estas mujeres tiene una historia de vida atrás, desde aquella que desde pequeña quería ser médico y salió de su pueblo para lograrlo, o aquella otra que siempre curaba a sus muñecas sabiendo que para eso había nacido, el poder de la mujeres, se manifiesta en muchas formas, este no es sobre pasar por sobre encima de otros, es tener la apertura para poder comunicarse y tomar decisiones que cambiaran el rumbo de sus vidas y el rumbo de las nuestras.
Por. Dra. Graciela Quiñones Bahena